COMO PANDORA

Guardabas este amor
tan en secreto
que despertaste en mí
mis más oscuros deseos.

Aquellos celos
que jamás había sentido
aquella curiosidad por saber
porque tan tuyo lo ocultabas.

Tenía entre mis manos
como la caja de Pandora
donde encerrábamos
nuestra pasión diaria.

Le pusiste un candado
con dos llaves
de nuestros corazones
que solamente tu y yo las poseíamos.

Y fueron tales las ansias
que despertaste en mi
las intrigas de este amor
tan camuflado

que mis anhelos de abrirla
fueron tantos
que usé mi clave
tan fielmente guardada.

Abrí de a poco
ese cofre tan valioso
al no saber de ti
por días y semanas

y liberé aquello
que celado y escondido
por mucho tiempo
tu allí lo custodiabas.

Sin darme cuenta
quizás por egoísmo
o por miedo a la verdad
tan disfrazada

que solté marañas de maldad
que se escondían
lacradas bajo aquella
sólida tapa.

Los enemigos de este amor
soltaron sus amarras
y descubrieron lo que allí
disimulado tu cuidabas.

Este amor por mi
tan sagrado, tan sublime
que tu entorno manipulador
no consentiría.

La caja de Pandora
ya fue abierta
al descubierto quedaron
nuestros sentimientos

pero intactos y fortalecidos
luchan aún por estar juntos
y aunque los liberé
de nuestro encierro

todavía siguen estando
guardadas nuestras almas
porque aún quedó intacta
lo único que no escapó, nuestra esperanza.

Diana Chedel -Argentina-