¡AH... EL AMOR!

Ah... el amor!
Inventé un arcoíris esta mañana,
quise cubrir tu cintura de colores,
ahuyentar con la brisa mis temores
y beber el aliento de la lluvia temprana...

Con la frescura leve de la tarde
inventaré nuevas alas para el vuelo,
volaré al horizonte de un nuevo suelo
donde una tibia primavera nos aguarde.

Mis nuevas alas habrán nacido del alma
serán de águila renovadas cada tarde
cuando las horas del día mueren en su calma.

Cada noche, algarabía, resplandores
de luceros, y de estrellas los fulgores
dejando luz y miel a nuestro amor del alma...

RICARDO FLORES JOYA -El Salvador-