QUE LOS PLIEGUES

Que los pliegues
de mis sábanas
sean la forma
de tu cuerpo.
Que mis labios
encierren ese
tu aliento,
que me colma
me elevan,
me encienden
presa en las rejas
de mi pasión.
Preciso tus manos
recorriendo
mi cuerpo,
floreciendo
las flores
que no tuvieron primaveras
en mis inviernos.
Se sembraron
mis sueños
huellas de tus
pasos por los
de los senderos
del olvido.
Pusiste alas
a mis tristezas
transformadas por
sonrisas en
mis labios.
Despertándose en ti.
Durmiendo fuera
de mi cuerpo
dentro de
tus sueños.
Me invadieron
tus esencias,
la madreselva
de tu presencia,
la mojada hierba
de tu piel.
Se durmieron
tus caricias,
las crisálidas
somnolencia
de mis ojos,
despertando las
mariposas de mis
pupilas.
En cada amanecer
quiero ser
la imagen que
te refleja,
la primera en nacer
la última en morir
en tus pensamientos.

ETERNA SOLEDAD