ERES TÚ, MI INSTANTE

No conocí hombre
hasta que llegaste a mí
No fui mujer
hasta que penetraste en mí

Dejaste una señal indeleble
en mi cuerpo y en mi alma
Dejaste de ser un príncipe
Que cabalgaba en mi mente

Te enamoraste de mi adolescencia
De la dulzura de mi edad temprana
Te gusto sentir mi inocente pasionalidad en el acto
Me gustó tu pausa, tu espera
Y el disfrutar del deseo de ambos

Me gustó la llegada al culmine
ansimantes y sin palabras
Dueños de los escalofríos
que recorrrìan nuestros cuerpos

Olor a raíces se mezclaron
al olor de la cera consumida
se apagaron las velas
que iluminaban nuestros cuerpos desnudos

Se apagaron ante nuestra luz
y ante el deseo de nuestros besos
Ante nuestros gemidos y susurros
de nuestro amor eterno

Una eternidad
que pareció durar un instante
viendo el apagarse de esas velas
y el parecer unidos y distantes

Distantes en la pasión
ahogada en el devorarse
Unidos en la esperanza
de que se repita este maravilloso instante

MANOLI SAN MIGUEL HERRERA