SUEÑO ETERNO

Amó la vida,
deseando la muerte
no, no es macabro
este anhelo.

Es que por un breve
lapso de tiempo
conocimiento en plenitud
inmensidad de la paz
fue otorgado
en su momento.

Donde los colores
del firmamento
rebozaron de alegría
increíble encuentro.

Ese fugaz soplo
perfecto causante
de continuar y profundizar
ver las almas
plenitud de su hermosura.

Celebrándose la existencia
camino que se transita
entristeciéndose por las banalidades
prepotencias del egoísmo
donde el odio camina sin piedad
y las guerras sin ninguna razón.

Si nada nos llevamos
para la otra dimensión
cuál es la gana
mostrar tanta malevolencia.

Saber que existe
inmensa paz
ninguna descripción
puede tocar su esplendor
regalo sublime
para este corazón.

Lo que es un hecho
vagamos como espíritus en pena
buscando entre las estrellas
corazón que grita y anhela,
aprendiendo lecciones nuevas
con la esperanza
que el alma crezca.

Es necesario comprender
lo que a gritos
se desea saber
quizá por temor
por tantas futilidades
temerosos del amor.

Noche eterna
luz de la vida
iré a tu encuentro
cuando todas las lecciones
sean adquiridas.

Sandra Méndez -Guatemala-