mi habitación no da al sur
siempre temí la sudestada
aire frío espinas en el rostro
Buenos Aires parece un gigantesco
barco a la deriva
sus estoicos árboles mecidos
por ausencias
la tarde es violeta y cae
quisiera viajar en tren
observar girasoles vacas
sobre la hierba mojada
agradecer sus dádivas
la blanca miel
la ciudad es un gigantesco
barco a la deriva
¿qué perciben los ciegos
cuando tocan en braille
Buenos Aires?
¿qué será la luz para los ciegos?
¿qué el violeta de la tarde?
María Chapp -Buenos Aires, Argentina-
Publicado en la revista Con voz propia 52
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