Hoy recuerdo a Garrid...
el que con gracia,
con su mascara de risa y mil sorpresas,
curaba de las almas las tristezas.
Hoy recuerdo a Garrid...
en sus dolencias,
que en lo profundo de su ser el escondia,
al compas de alegres melodías.
Hoy soy Garrid...
pues ante el mundo inquieto,
hago de pesares mil sonrisas,
mientras siento que mi alma silenciosa
algo estraña, entre miles cosas;
es un vago sentir allá en lo arcano,
donde comulgan sentimientos,
donde el alma indefensa solo atina
a ocultar sus nostalgias entre el viento.
Hoy soy Garrid...
mañana... cambiare el destino...
y alguien vendrá a caminar mis pasos
y recuerdos serán... ya mis fracasos.
Hernando Arias Silva -Bucaramanga, Colombia-
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