martes, 19 de marzo de 2019

¡YA ES TARDE QUE APAREZCAS, PORQUE EL TIEMPO BORRA TU HUELLA; NO HAY AMOR QUE TÚ MEREZCAS EN MI VIDA NI EN LA DE ELLA!


Como loca enamorada
se fue a merendar un día
de tarde aterciopelada;
la recuerda todavía.

Como un beso de ternura
abrazados sobre el suelo,
son dos niños de alma pura
como ángeles en su cielo.

Mariposas aclamaban
el amor con alegría,
pues los labios les temblaban
por la magia que surgía.

Pronto un ángel va y les guiña,
les señala allí una estrella:
en su vientre habrá una niña
de la pasión que hubo en ella.

En silencio bajo el cielo
estrenó su único nido.
Su estrella levanta el vuelo,
la pasión le ha florecido

Campanadas de la iglesia
desde el aire le reclama
a la niña de su amnesia
que se casa esta mañana.

Aquél padre se perdió
en las brumas del olvido,
pero ahora apareció
con dos hijos de otro nido.

Maria Sirena Matri Mar -ESPAÑA-

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