martes, 19 de marzo de 2019

MALHERIDO


Daquesta guisa, heme aquí, malherido
rota la cota por mil cuchillos
¡ay, malandrina!, ¡cómo he caído!,
en la misma trampa de tus peregrinos.

La boca seca por un suspiro
e una promesa de voso auxilio
ca, non conceda si non es conmigo
pero me dexais con poco xuicio.

Mais non tengo quexa
a fuer, non hicisteis la promesa
de querer a quien a vos os quiera
como mi boca así ofreciera
como os ofreció su abrigo
pues solo fui un capricho
que falaba por las orexas
e debió ahogarse en el río.

Disculpad, por ser vosa pena
aunque amaros me hiera
e también fuerais mi martirio,
non os acuso de vosa belleza
os acuso de ser mi vicio.

E... si xusticia aquí la hubiera
daqueste amor fuese a fuer lo prohibido
mais, la sangre que rebosa en mis venas
lacera un coraçon, de amor, vacío.

Que presta cara a toda afrenta
por non querer evitar tanto litigio
con todo aquel que a vos os pretenda
e, daquesta guisa, heme así, malherido.

Luis Maria Saiz Laso

No hay comentarios:

Publicar un comentario