LOS ÚLTIMOS LATIDOS DEL AÑO

Cuántas cosas se lleva este año en sus costados,
entre mis horas vividas de tragos amargos, de aromas infinitos, derramados en los blancos lagos.

Cuánto mi corazón ha llorado, entre los matices de los ecos dorados, entre el amor de una madre, que marcó todos los sonidos que marcaron mis pasos.

El año despega, en su invierno frío, habiendo atravesado su linda y florida primavera, el otoño con su rocío, y su verano con su sol bravío.

Llevándose con él, esos días, llenos de dolor y espanto, de horas tristes que quebraron mi llanto.

Un año lleno de dolor y rabia, de hojas rotas entrelazando el corazón de noches sin luna, sin el latir de las estrellas, sin el sol que abrace mi cuna.

Hoy le digo adiós, a este año que rompió mi corazón,
que llenó de amargos tragos mis noches, y cubrió de miedo mis soles.

Adiós a este año, que lleva entre sus alas mi alma, adiós por esas horas regaladas, por esos minutos de caricias, en las sombras quedan guardadas.

Este año que llenó mi vida, de olas de río, de la ternura de las blancas acacias, cubriéndome de ramas rotas,
entre el latir de mi alma y lágrimas quebrantadas.

Olivia Cortes Rubio -Málaga-