Yo te amo,
te amo de la manera más limpia
y te amo como se ama en la tierra y como se amó en las garras de otros más y entre amores puros, y en el que fue nombrado por Julieta, la más viva: Entre escombros pasados y sin miedo a distancias, y a nada.
Y te amo para gritar
y te amo para que cualquiera
[vea lea o crea]
y que hasta allá sienta.
Te amo a señas,
en letra que dice tanto aquí:
¡De que te ama!.
Te amo en oscuridad que lenta se va perdiendo y al sol que pronto, muy acelerado va llegando.
Te amo
y conmigo para tocarte, y a lo lejos, para sólo no sufrirte, sino extrañarte.
Te amo con días
y con todos los días
y con todas las horas que no son días, (son grandiosas noches);
hasta una tarde, y la otra de ayer,
y también la otra que no se ve pero vendrá a buscarte.
Te amo en sueño
y al grado de despertarte.
Te amo en vida
y en la que no será, hoy no, nunca podrá llamarse así si existen letras mías, y ni éso, que no hay duda, que sí vendrá, pero quien pueda arrancarte, jamás, nadie, aquí al tiempo, no estaré Yo, pero si contarán los que creen y creerán en esta pluma: Sí en este amor o en el que les cuenten después, pero éste es mío, y ella es mía.
Dudas, Aurora mía.
Reyvik -México-
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