NUESTRO SUEÑO

Hoy elevé mis alas,
agité mi cuerpo y con él,
sobrevolé envuelta de olas que
van y vienen en mi agitado mar.
Engarzamos nuestras manos
con cintas de algas de cristal
y caminamos descalzos sin cesar.
Bailábamos al tono de nuestras huellas
para ver quién ahondaba más.
Y… reíamos al danzar con
el ritmo que, el susurro
del viento, nos hacía llegar.
Me sentí timón de tus caricias,
siempre serás mi capitán.
Yací como ola en tus venas que
a tu corazón hacía vibrar.
Anuda esas amarras dónde
jamás me pueda escapar.
Hoy, aún danzo al son del mar.
Grito un te quiero para que suba
lentamente la creciente y agitada mar.
Van pintando nuestros sueños
el horizonte que comienza a despuntar.
¿Me sigues con tu cuerpo de al compás?
Nos vestiremos de espuma, pura
como el azahar y, el columpiar de las olas
construirá nuestro sueño… nada menos, nada más.

Juana Campos Cortés