domingo, 11 de agosto de 2013

INFUSIÓN DE GINEBRA

Para mis venas,
Esporádica luciérnaga para mis brazos,
Que no me suma El cuello apenado En su dolor lateral de retina, En su esbozo aclarado Del tiempo, En su yugular del todo ebria de traslados;
Voy a dejar al sueño contenido Mientras hago el desamor.
Para eso lo elegí.
No hay sufrimiento en vano, Ni vida Que no lo alcance o lo redima.

Lidia Fernández
Publicado en la revista Dos poemas y un café -Agosto 2013-

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